Fue Sophia Hayden Bennett, quien se convirtió en la primera arquitecta mujer en el siglo XIX. Nació en Chile en 1868 y más tarde se mudó a Estados Unidos para estudiar arquitectura. A los 21 años, ganó un concurso de diseño para el Pabellón de la Mujer en la Exposición Mundial Colombina de 1893 en Chicago.
Hasta entonces, la mayoría de las mujeres no tenían acceso a la educación en arquitectura. Bennett desafió las convenciones de su tiempo y demostró que las mujeres también podían tener éxito en este campo. Su diseño para el Pabellón de la Mujer fue muy innovador y le brindó reconocimiento y prestigio en el mundo de la arquitectura.
Aunque su carrera fue prometedora, Bennett no logró alcanzar la misma fama y éxito que sus contemporáneos masculinos. Trabajó en varios proyectos, pero ninguno tan destacado como el Pabellón de la Mujer. A lo largo de su vida, luchó por ser reconocida y valorada como arquitecta en un mundo dominado por hombres.
La historia de Sophia Hayden Bennett es un recordatorio de la importancia de reconocer y celebrar los logros de las mujeres en todos los campos, incluida la arquitectura. A pesar de los obstáculos y prejuicios que enfrentó, Bennett dejó su huella en la historia de la arquitectura y allanó el camino para las futuras generaciones de mujeres arquitectas.