La ética es una disciplina filosófica que se encarga de reflexionar sobre el comportamiento humano y las acciones que realizamos en sociedad. Su objetivo es determinar lo que es correcto o incorrecto, y establecer principios y valores que nos guíen en nuestras decisiones.
Una frase que define la ética es "haz a los demás lo que te gustaría que te hicieran a ti". Esta frase, conocida como la regla de oro, nos invita a tratar a los demás con respeto, empatía y consideración.
La ética también se relaciona con la búsqueda del bien común, es decir, de aquello que beneficie a la sociedad en su conjunto. No solo se trata de tomar decisiones individuales, sino de pensar en el impacto que estas pueden tener en el entorno en el que vivimos.
En definitiva, la ética nos ayuda a reflexionar sobre nuestras acciones y a tomar decisiones responsables y conscientes, considerando siempre el impacto que estas pueden tener en nuestra propia vida y en la de los demás.
La ética en palabras sencillas se puede describir como el conjunto de principios y valores que guían nuestras acciones y decisiones.
La ética implica tomar responsabilidad por nuestras acciones, ser conscientes del impacto que estas tienen en los demás y actuar de manera moralmente correcta.
La ética se basa en la honestidad, la justicia y el respeto hacia los demás, promoviendo el bienestar común y evitando cualquier tipo de daño o perjuicio.