En ocasiones, es común sentir que el calor se encuentra encerrado en nuestro cuerpo, lo que puede generar incomodidad e incluso molestias. Por suerte, existen algunos métodos o remedios caseros que nos pueden ayudar a aliviar estos síntomas.
Una de las opciones más populares es beber líquidos frescos o tomar una ducha con agua fría. Esto ayuda a que nuestro cuerpo se refresque y a su vez, a que se elimine el calor acumulado. También es recomendable usar ropa fresca y cómoda, en especial en épocas de alta temperatura.
Otro método que es efectivo es evitar alimentos picantes y grasos, y consumir alimentos frescos y que contengan mucha agua, como frutas y verduras. Además, practicar ejercicios físicos en horarios menos calurosos y en lugares frescos, es una buena manera de mantener el cuerpo en un estado adecuado.
En resumen, para sacar el calor encerrado, es importante mantenerse hidratado, usar ropa cómoda y fresca, evitar alimentos picantes y grasos, consumir alimentos frescos con mucha agua y practicar ejercicio en horarios adecuados. Con estos pequeños cambios, lograremos mantener nuestro cuerpo fresco y saludable durante todo el día.