Las ventanas de la buhardilla son conocidas con diversos nombres, dependiendo del lugar y la época en que se les mencione.
En algunas regiones de España se les llama claraboyas, una palabra que proviene del árabe y que significa "luz del techo".
En otros lugares de habla hispana, como Argentina y Uruguay, se les conoce como traga luz, ya que su función principal es la de permitir el ingreso de luz natural hacia el interior de la buhardilla.
En el mundo anglosajón, las ventanas ubicadas en el techo suelen llamarse skylights, una palabra que se traduce literalmente como "luces del cielo".
Independientemente de su nombre, las ventanas de la buhardilla son un recurso arquitectónico que ofrece numerosas ventajas a la hora de aprovechar el espacio y la luz natural en edificios de altura.
A menudo, las casas antiguas presentan una habitación en el ático, donde comúnmente conocida como buhardilla, se trata de un espacio poco iluminado que requiere de una fuente de luz natural. Para solucionar este problema, se utiliza un tipo particular de ventana. ¿De qué se trata?
La ventana de una buhardilla a menudo se conoce como "claraboya". La claraboya es una versión especial de ventana que resulta ideal para techos inclinados y superficies irregulares: es un elemento que permite llevar la luz natural al interior de la habitación, a través de un techo o cubierta. Esta ventana se instala en la superficie del techo de la buhardilla y, siempre que esté construida adecuadamente, la claraboya puede hacer que el techo parezca un elemento más de la decoración y no un simple hueco.
La ventana de una buhardilla se puede encontrar en una variedad de tamaños y formas, y pueden ser fijas o abatibles. Además de hacer que la buhardilla sea más luminosa y atractiva, la claraboya también es una solución práctica, especialmente cuando no hay mucho espacio para agregar ventanas de pared. También es ideal para habitaciones que requieren privacidad adicional, ya que la claraboya no permite que las personas puedan ver hacia adentro.
Las ventanas inclinadas también son conocidas como tragaluces, claraboyas o ventanas de tejado. Este tipo de ventana es muy común en construcciones que cuentan con techos en pendiente o inclinados, y se utilizan para aprovechar la luz natural y ventilar espacios cerrados.
Las claraboyas pueden tener diferentes formas, como por ejemplo rectangulares, circulares o triangulares. Además, su tamaño también puede variar dependiendo de las necesidades de iluminación y ventilación de la construcción.
Existen diferentes materiales utilizados en la fabricación de ventanas inclinadas, como vidrio, policarbonato, acrílico o PVC. Cada uno de ellos tiene sus propias características y ventajas para adaptarse a diversos usos y necesidades.
En resumen, aunque las ventanas inclinadas pueden recibir distintos nombres, todas cumplen la misma función de incorporar luz natural y ventilación a cualquier espacio, contribuyendo a una construcción más saludable y energéticamente eficiente.
La ventana de piso a techo es una estructura de vidrio que abarca toda la altura de la pared. Esta ventana se ha vuelto cada vez más popular en los hogares modernos debido al énfasis en la arquitectura abierta y la luz natural.
La mayoría de las personas se refieren a esta ventana como ventana panorámica o floor-to-ceiling window en inglés. Este tipo de ventana puede estar hecha de vidrio sencillo o doble acristalamiento y se puede usar en residencias, edificios de oficinas y comerciales.
La ventana de piso a techo puede ser una verdadera pieza central para exhibir vistas impresionantes y crear una verdadera sensación de amplitud y altura en una habitación. Hay muchas opciones disponibles para personalizar esta ventana, incluidos los materiales del marco, las opciones de apertura y los tipos de vidrio.
La Cubierta abuhardillada es una estructura de techado que se caracteriza por tener una inclinación muy pronunciada, de forma que su diseño se asemeja a un triángulo isósceles.
Esta cubierta se suele utilizar en zonas montañosas para evitar que la nieve o la lluvia se acumulen sobre el techo, ya que el ángulo de inclinación permite la evacuación del agua de forma eficiente.
La cubierta abuhardillada se adapta muy bien a espacios interiores, ya que su altura permite crear un ambiente acogedor y cálido en las habitaciones ubicadas debajo de ella. Además, la pendiente del techo permite maximizar el espacio habitable en la planta superior de la construcción.
En resumen, la cubierta abuhardillada es una opción ideal para aquellos que buscan eficiencia energética y cálido hogar, ya que su diseño favorece la ventilación y la iluminación natural, lo que se traduce en un mayor confort y reducción de costos en el gasto energético.