Si cuentas con una habitación pequeña, puede ser un desafío distribuir el espacio para que sea funcional, y a su vez, se sienta acogedora y cómoda. A continuación compartiré algunos consejos sobre cómo lograrlo.
Primero, es importante que elijas muebles que sean proporcionales al tamaño de la habitación. Por ejemplo, en lugar de una cama king size, opta por una doble o una twin, y en lugar de un sofá grande, escoge uno más pequeño o un sillón. Además, es recomendable utilizar muebles que también sirvan para almacenamiento, como una cama con cajones o estantes incorporados.
Otro aspecto clave es la organización del espacio. Aprovecha al máximo las paredes y utiliza estantes flotantes o empotrados para almacenar libros y otros objetos personales. Asimismo, utiliza cajas o canastas para aprovechar el espacio debajo de la cama y en el armario. Por último, opta por una paleta de colores claros y neutros para que la habitación se sienta más amplia y abierta.
Por último, es importante considerar la funcionalidad de cada área. Para lograr esto, puedes dividir la habitación en diferentes zonas: una para dormir, otra para trabajar o estudiar y otra para relajarte o ver televisión. Para lograr una separación visual, puedes utilizar cortinas, paneles japoneses o biombos.
Con estos sencillos consejos, podrás distribuir el espacio en tu habitación pequeña de manera efectiva, logrando un ambiente funcional y acogedor al mismo tiempo.